sábado, 30 de junio de 2012

Este es.

Es muy grande el amor que siento por Boro y todo lo que Él va generando en mí a medida que avanza el tiempo y se consolida y afianza nuestro vínculo afectivo de unidad y fidelidad.
Siempre supe que en algún momento de mi vida me iba a llegar la gracia de contar con una compañía como la de Él, aunque no estaba seguro cuando sería y tampoco me afanaba en provocar este momento que, no dudaba como he dicho, que llegaría tarde o temprano.
Ocurre generalmente que ya me predispongo bien para encarar cualquier cosa que implique el hecho de estar con Boro, escribir alguna entrada de este blog, o el tema de cualquier cosa, repito, que tenga que ver con Él.
Realmente soy un feliz dueño y en cada cosa que vivo junto a mi perro puedo sentir que estar junto a Él, tenerlo a mi lado, sentir su presencia y su amor, me hacen muy bien en todos los aspectos de mi vida.
Este es mi Boro, ya lo he dicho unas mil veces o más, lo sé; y haciendo alusión a esto último, algo que también he dicho ya en varias oportunidades es que es uno de los motivos más importantes y relevantes de mi felicidad.

    

viernes, 29 de junio de 2012

Tan vueltero.

Cuando estás así, que te quedás tirado cerca de tu balanceado porque no estás con mucho hambre y a la vez esperás que yo te lo haga más tentador agregándole zapallo, manzana o algún aditivo vegetal o frutal que te gusta, me pregunto si me estarás midiendo a ver si siempre termino agregando algo a tu alimento para que lo comas.
Igual te digo una cosa Boro: Así no vale! Estamos?!


Ah, aclaro que finalmente le agregué manzana rayada y terminó yendo a comer.


jueves, 28 de junio de 2012

Fin de juego abrupto.

Estando en la plaza con mi Boro, mientras lo veía y escuchaba jugar con un par de perros, en un momento que desvío la mirada para pelar uno de los varios chupetines con chicle que saboreo mientras estoy ahí con Él (para pasar el tiempo), y en eso escucho el ladrido de dolor o sorpresa (inconfundible sonido para mi) de mi perro.
Resulta que entre esos perros con los que jugaba muy entretenidamente había una hembra y bueno, debo reconocer que mi Toto es un Latin Lover de la primera hora y ante el hecho de encontrarse con perritas intenta ejercer su accionar de macho si es que ellas andan cercanas al período del celo, y entonces en esta conquista que llevaba a cabo mi amigo, parece que la cansó a su seducida y ésta puso fin a tanta cortesía recibida tirando un ataque para sacárselo de encima.
Jeje! En este tipo de entuerto no me aflijo ni me preocupo o molesto (una vez que puedo darme cuenta de que no ha pasado nada más que ese fugaz encontronazo que es cosa de breves segundos) y sigo con lo mío y a otra cosa.
Así fue que Boro se vino a sentar a mi lado en el banco de plaza, como lo ven en la foto, y todo terminó abruptamente en este atardecer de juegos en la plaza.
Final de la historia.

miércoles, 27 de junio de 2012

martes, 26 de junio de 2012

Desde siempre lo ama.

Es el mar para Él, al igual que para mi,
la mayor atracción que ejerce la naturaleza en su vida.
Acá, en esta foto, cuando era un cachorro todavía
y ya había amaba y se embelesaba con él y su inmensidad.

lunes, 25 de junio de 2012

Debo hacerlo.

Boro de cachorro, en uno de los momentos
en los que comenzaba a compartir su vida conmigo.
Debo agradecer el hecho de tener a Boro en mi vida ya que desde el momento en que lo he incorporado a mi existencia la misma ha ido modificándose positivamente y mejorando mi calidad de ser humano.
Siempre me interesó ser cada día mejor persona, dejando atrás las cosas feas y negativas que descubro en mi forma de ser y tratando de incorporar nuevos hábitos y costumbres, además de formas de desenvolverme en la vida y con las demás personas, que vayan moldeándome en pos de ser un ser que sólo viva con el objetivo de crecer interiormente todo el tiempo.
Y Boro, y la dicisión que tomé de incorporarlo a mi vida en primer lugar, ayudan a que transite este camino de mejoramiento personal continuo.
Afortunadamente fue Boro, mi Boro, el que terminó siendo el compañero no humano de todos los días y es gracias a la convivencia e intercambio de distintos tipos de momentos que tengo con Él que crezco cada día en este hermoso vínculo que a su vez mejora y dignifica mi vida.

domingo, 24 de junio de 2012

Mi amigo fiel.

Cuando dormís tan serenamente me hacés saber que estás muy a gusto y tranquilo en nuestra casa y que esa protección que intento darte cada día surte efecto haciéndome sentir que estoy haciendo bien las cosas y que tu llegada a mi vida fue, amén de para engrandecer mis días, para hacerte un ser feliz y dichoso.
TE AMO BORO, MI AMIGO FIEL.

sábado, 23 de junio de 2012

¿Qué haría yo sin Él?

Quiero comenzar esta entrada aclarando que sé que en algún momento deberemos separarnos por esas cosas que tiene la vida y que hace que justamente cada vida sea de una duración diferente a otra y más teniendo en cuenta los periodos de tiempo que generalmente tienen las de unas y otras especies de seres vivos que interactuamos en la tierra en distintos momentos de nuestra vida.
Por todo esto y salvando este punto de inflexibilidad que se dará indefectiblemente y que reflejo en ¿Qué vas a hacer cuando Boro no esté más en tu vida?, me preguntaron vuelvo a hacerme la pregunta que da título a estas líneas: ¿Qué haría yo sin Él?
Es por lo tanto, y teniendo en cuenta que tengo en claro (desde la razón aunque no creo que desde el corazón) el tema de que algún día uno de los dos partirá y el otro quedará solo y con el recuerdo nada más, es una pregunta un tanto retórica y sin respuestas definitivas ni que den cierre al tema o despejen una duda que tampoco se me plantea seguido en mi vida la que hoy viene nuevamente a mi.
Pero en el caso de intentar dar un esbozo de contestación podría decir que de irse Él, todo sería en algún punto de mi excistencia, de una soledad que solo lastimaría mi vida; de un dolor que se atenuará con el tiempo y el correr de los años aunque jamás desaparecerá. Será un segundo, ese tiempo que decida que nos hemos separado hasta un nuevo encuentro el que marcará mi vida dejando mi corazón solitario en ese vacío que ninguna persona, más o menos cercana a mi vida afectiva, podrá llenar de ninguna manera.
Pero la verdad es que no me sale decir mucho más que esto. Tampoco sé si quiero explayarme en este tema que, como pueden ver, sólo me ha llevado a abordarlo una vez (en lo que llevo desde la creación de MI BORO Y YO) la pregunta de una persona que detonó en mí el interrogante personal, pero no más que eso.
No creo que adelantarse a dolores y grandes tristezas sea oportuno, aunque sí dejar en claro que sé que algún día puede pasar aunque como no deseo que suceda, ni lo pienso y hasta lo olvido para vivir más despreocupadamente.
Como final de mi reflexión tomo prestado de mi entrada, nombrada al principio de este escrito, lo que creo define mi vida junto a Boro y responde a este tipo de temas:

"Amo a mi Boro. Mi Boro me ama. Muchísimo nos amamos los dos. Disfrutamos enormemente el hecho de estar juntos y compartir nuestras vidas. Nos hacemos felices y nos damos lo que cada uno necesita y espera del otro, a la manera de cada uno por supuesto, y eso es lo que hace bella y pura nuestra relación.
Me quedo con esto. Me hace bien. Lo que deba ser y pasar será y pasará. El resto, es parte de la vida misma y será parte de nuestra historia." ♥

jueves, 21 de junio de 2012

Por todo eso.

La compañía de Boro significa muchas cosas en mi vida. Cada día, casi sin darme cuenta, puedo corroborar que Él ha llegado a mí para hacerme sentir amado las 24 horas del día sin excepción, todo el tiempo, y eso es tan importante y fundamental para mi como para todo ser humano que al sentirse de esta manera, valorado, necesitado y AMADO, no puede menos que ser feliz y adorar a ese ser especial que es quien le provee de esas hermosas sensaciones y sentimientos que ennoblecen y engrandecen a cualquier ser vivo que tiene la gracia de experimentarlos.
Y no es que no reciba amor por otros canales, de (otras) personas, pero el caso con mi perro, es que ese amor (que puede llegar a existir en las personas aunque dudo que con la intensidad, pureza y autenticidad que existe en los animales) es total y continuo, sin ninguna intermitencia que pueda darse producto de enojos (los animales no se enojan), ofensas (los animales no se ofenden), heridas (los animales nunca se sienten lastimados espiritualmente ante las reacciones de sus compañeros de vida humanos) o de cualquier otro motivo que haga resentir el amor a brindarse de alguna de las partes.
Y esto yo lo aprendí desde que mi vida se iluminó por compartirla junto a Él, y es por eso que jamás me enojo con Él, amén de que no me de motivos, y trato de aplicar esta fórmula de paz y amor hacia mis relaciones con los demás seres vivos que me rodean, agiornando de esta forma mi vida desde lo personal y lo social, y todo gracias a la experiencia de vivir junto a Boro.
Todo es muy lindo, todo es muy sano y todo es muy gratificante al lado de mi perro. Por eso lo amo. Por eso lo cuido mucho. Por eso le dedico este blog que nace desde mi corazón. Por eso trato de que Él sea Feliz a cada momento de su vida. Y por eso, yo soy Feliz.

martes, 19 de junio de 2012

Les pido que me lo hagan saber. GRACIAS.

Quiero, en este blog al menos, no decaer ni 1 minuto en la expresión que le doy a las muestras de afecto y simpatía que tengo hacia mi perro.
Si decae o mengua mi intensidad con respecto a este tema me gustaría que me lo hagan saber ya que internamente no disminuye en lo más mínimo mi amor por Él.
Viéndolo dormir mientras yo hago cosas en casa, esperando mientras yo le sirvo el alimento balanceado y Él mirando cada movimiento de este trámite, caminando a mi lado por la calle y mirándome de tanto en tanto con su carita de felicidad absoluta, llamándome la atención para que le de bola y juegue un poco con Él o simplemente estando ahí al alcance de mi vista, siempre es un placer poder verlo y darme cuenta de que esa nobleza y hermosura de perrito es quien me acompaña todos los días de mi vida y vive por mi, para mi y con la única intención de estar conmigo.
Por eso, si dejo ver en mis entradas de blog una falta de intensidad con respecto a la expresión del amor y la felicidad que comparto y que me provoca tener a Boro, mi perro, en mi vida no lo duden y me lo hacen saber, si? GRACIAS.

lunes, 18 de junio de 2012

¡¡Felicitaciones Facu!!

Foto que nos muestra a Boro y a mi a poco tiempo de su llegada a casa
fortaleciendo nuestro vínculo que sería de lo mejor que nos pasó en la vida.
Estos días de otoño y sus respectivas noches, bien fríos y de esos que dan ganas de quedarse adentro de la casita de uno saliendo lo mínimo e indispensable posible, son los momentos en los que estando sólo -salvo por la compañía de mi perro- siento que es tan bueno y lindo tenerlo conmigo que debo felicitarme una vez más por la decisión tomada y llevada adelante a principios del año 2008 cuando se puso en movimiento y se concretó la inmejorable e impagable idea de traer a Boro a vivir conmigo y compartir mi vida.

domingo, 17 de junio de 2012

Gracias por pasar.

Yo tengo un afecto y predilección especial por mi perro Boro, lo saben todos ustedes que leen de tanto en tanto algunas entradas de este blog que he ido armando (y lo sigo haciendo) para transmitir lo que significa una vida plena a través de lo que brindan estos seres de amor a la vida de los humanos que comparten cada día de su existencia junto a ellos.
Por eso tantas fotos, cuando no videos, y en definitiva imágenes animadas o estáticas que lo muestran a Él y me muestran a mi en diferentes momentos de esa hermosa relación y profundo vínculo que se ha generado entre nosotros dos.
Cada foto da muestra de su hermosura física y de su nobleza y hermosura también porque no, interior; y es un placer para mi compartirlas y brindarlas a todos los que gusten de pasar un instante al menos por este blog para disfrutar de toda la belleza, el amor y la libertad que significa para mi tener a este amigo y compañero de vida no humano en mi vida.

jueves, 14 de junio de 2012

En la plaza.

Así estamos por estos días cuando nos agarra el atardecer y comienzo de la noche en la plaza, ya que como sucede en otoño los días se acortan y oscurece más temprano.
Yo, producto del frío, a veces más y otras menos, me quedo sentado en algún banco y Boro anda por ahí oliendo y husmeando todo y jugando un poco con otros perros hasta que se cansa y viene a sentarse junto a mi en el mismo banco o en el suelo, como puede verse en esta foto, y cada tanto campanea que yo me encuentre ahí, cerquita suyo.
Así es nuestro paseo de la tarde en el que salimos el mayor tiempo en el -que podríamos llamar- paseo largo del día.

miércoles, 13 de junio de 2012

Acá, en este lugar.

Acá, en este lugar de la casa, el pasillo de entrada y la puerta de ingreso al depto., es el lugar donde Boro se tira casi siempre a descansar cuando estoy en casa y donde sé fehacientemente que me espera el tiempo que esté fuera de ella, ya que al llegar y salir del ascensor siento el ruido que hace al pararse y sólo tengo que tocar el piso ni bien abro la puerta para sentir que está calentito porque él estuvo ahí aguardando mi llegada.

martes, 12 de junio de 2012

lunes, 11 de junio de 2012

Recordando calorcitos.

En días tan fríos como los de este otoño recordamos esos días en los que el sol y el calor nos hacían refugiar en la sombra de algún frondoso árbol que hoy seguramente estará raquítico producto de la caída de sus hojas. Y ahí estábamos en una plaza, como de costumbre, y aunque yo no aparezca en la fotografía, si sale Boro es porque estoy ahí, a pocos metros de Él.

domingo, 10 de junio de 2012

La más hermosa compañía.

Hay días de la semana en los que me siento más solo que en otros. Y sí, yo, al igual que mucha gente que vive sola en una ciudad grande y llena de gente, a veces me siento así, solo.
Los domingos, especialmente en los atardeceres cuando ya va terminando el día y estoy en la plaza con Boro, es un momento en el que aflora esa soledad que si bien no es total ni me sumerge en un estado de desamparo ni de tristeza debido, entre otras cosas, a que tengo conmigo al ser más hermoso y compañero que jamás había pensado que iba a tener y que por supuesto es Él, Boro; de todos modos viendo que se termina el finde y arranca una nueva semana siento un poco de esa soledad que me hace sentir que estamos solos en el mundo mi Boro y yo. Es decir, solos en ese momento cuando cada uno está en lo suyo, con los suyos (momento que te indica quienes son tu compañía posta, la real) y es ahí donde veo que lo que realmente tengo en materia de compañía es justamente mi perro.
Gracias otra vez entonces, Toto querido, por ser siempre desde tu llegada a mi vida, la más hermosa compañía que jamás imaginé tener.

Aburrimiento.


A veces
se aburre Toto
y sólo le queda
tirarse al suelo
y esperar
a que le llegue
su momento
de salir a la calle
a dar
un paseo
y airearse
un poco.

sábado, 9 de junio de 2012

Foto condicionada. Jeje!


A veces
y antes de pasar
a dormir a su camita
o directamente a la mía,
que es también la suya,
se duerme así en esta pose chaaaancha
como pueden ver,
en su sillón y producto de una mezcla
de relax, bienestar
y cansancio.


viernes, 8 de junio de 2012

Un vínculo muy diáfano que crece y brilla.


Jajaa..! Recurro a esta onomatopeya del sonido de la risa porque estaba riéndome solo al recordar cuanto me ocupaba en dejar en claro, y sólo para mi, que mi perro era sólo eso en mi vida: un perro o una -mal llamada por muchos- mascota y nada más; queriéndome autoconvencer de esta manera de que nunca traspasaría esa línea delgadísima de valorarlo como un integrante más de la familia, de la casa, y con el total significado que esto supone. Y pensar que creí que esto me iba a dar resultados!
El tiempo se encargó de demostrarme lo contario y el flacucho Boro que por entonces, a sus 2 años y un par meses se ve en la foto, poco a poco fue ganándome el corazón y ocupando un lugar de verdadera y hermosa importancia en mi vida.
Ya lo he comentado en varias oportunidades -por ejemplo en la entrada Sumé a Boro a mi vida como compañía, y para dejar de estar solo y en alguna otra como Me increparon y nos increparon, donde por otro tema desemboco en este tema central nuevamente- y he reconocido que aunque me empeñaba en no valorar desestructuradamente a mi Boro, como veía que muchos (o casi todos) los que tenían perros lo hacían con ellos, finalmente y como se nota en cada entrada de este blog, no lo pude conseguir y terminé dando rienda suelta a mi afecto y agradecimiento por este compañerito de vida no humano que me hace Feliz con su compañía, valga la redundancia.
Por todo esto puede que algunas veces redunde en temas, pero es en ese volver a tocarlos que siento que voy asimilando y creciendo en el vínculo con mi perro Boro y dando un paso más en la aceptación de que en la vida no hay nada estipulado y que las cosas que nos llegan, y nos gratifican y completan, vienen a darnos un golpe de afecto, de libertad (desde la movilización interna que nos provocan) y de diafanidad a nuestra vida.

jueves, 7 de junio de 2012

No son mascotas, son amigos y compañeros de vida no humanos.

Basta de llamar a nuestros compañeros no humanos, ya sean perros, gatos o de alguna otra especie, con el nombre de mascotas. No son mascotas, son amigos y compañeros.
Seres que comparten toda su vida con nosotros, entregándose y dedicando toda su existencia a brindarnos su amor y su alegría además de su compañía, merecen ser considerados como amigos o compañeros de vida.
Ellos han estado desde siempre, permaneciendo estoicos e impolutos, al lado de sus referentes humanos a quienes han amado incondicionalmente y de quienes sólo esperan amor y comida a cambio, nada más que eso, en retribución de todo lo que nos dan.
Debemos revalorizar desde la palabra a estos seres de amor y darles el lugar que merecen ocupar realmente en la vida de cada persona que los ama y los elije para compartir junto a ellos, nada más y nada menos que su vida.
Mi compañero de vida, tan fiel, hermoso y noble, jamás será considerado una mascota, porque entiendo como mascota a un ser que está ahí para complacer y considerarse muchas veces, algo así como un accesorio. Y mi perro, mi Boro, no es un accesorio, y yo lo elijo y lo privilegio por sobre muchos seres (humanos) que me rodean, sino por sobre todos.
Basta entonces de denominar así, a nuestros amigos no humanos. Basta de tener que denominarlos con un rótulo que los identifique y los ubique en un determinado lugar para sentirnos, también a través de esta denominación, superiores; algo que mucho nos gusta y solemos hacer los seres humanos.
Yo apuesto por considerar como 'a uno más' a quienes se ganan nuestro afecto y nuestra atención y contención diarios, y a terminar con eso de llamarlos de tal o cual forma determinando la escala o el orden de importancia que ocupan en la vida de una sociedad.
Basta de llamarlos así entonces. Compañeros de vida y grandes amigos merecen mucho más que un simple rótulo para ser nombrados e identificados grupalmente.

miércoles, 6 de junio de 2012

Allí estábamos.

Tarde de nov. o dic. del año pasado o del anteaño, no lo recuerdo muy bien; y ahí estábamos en Mar del Plata, nuestra querida ciudad con mar, tan amada por mi Boro y yo, donde disfrutamos cada momento desde que llegamos hasta que nos vamos.
Recuerdito en este frío otoño de junio donde, sin lugar a dudas, a ambos nos gustaría estar allí ahora mismo.

Tiene porte, no me digan que no.

Todos los perros son lindos, eso no está en tela de juicio, con mayores o menores virtudes estéticas (para darle un nombre a la belleza exterior), cada uno sabrá como hacer para ganarse el corazón de todo aquél que se acerque y permanezca un tiempo al lado de ellos.
Cada persona ama y ve como el más hermoso a su compañero de vida no humano, claro está, y por eso yo siempre proclamo que mi Boro es el más hermoso de todos los perros del mundo, pero sabiendo por otro lado que no me arrogo este título como único e indiscutible ya que, repito, cada compañero humano se siente poseedor del mismo título con respecto a su amigo no humano.
Como sé que mi Boro es hermoso, por lo tanto y reforzando la idea del párrafo anterior, lo fotografío desde el primer día que llegó a casa sabiendo que cada foto es para mi la más linda y la que merece ser publicada en este blog o en alguna de mis redes sociales.
Abordando un supuesto (algo chiquilín por lo poco realista) siempre digo que de tanto ser fotografiado por mi, mi perro sabe que debe quedarse quietito (esto si es real) y que debe posar (esto no es real, jeje!) y acompaño este supuesto que parte sólo del amor que siento por Él, diciendo que por este motivo es que sale tan hermoso en cada fotografía que le tomo.

Esta es una de esas, dignas de exhibición. Disfrútenla amigos.



martes, 5 de junio de 2012

Donde se queda, sale foto.


Es tan lindo este perro que vive junto a mi desde que llegó a mi casa, nuestra casa, para quedarse conmigo y hacerme sentir el compañero humano más feliz gracias a su obediencia, su educación, su inteligencia y su bondad que siempre lo fotografío en varios momentos del día, teniendo a mi favor que Él, se quede donde se quede y gracias a su belleza natural, ya es una foto impecable en si mismo.

lunes, 4 de junio de 2012

Sonriente.

Tanta alegría se desprende de mi perrito, quien ustedes bien conocen a esta altura por mis reiteradas y cariñosas publicaciones en este blog, que cada fotografía que le he tomado a través de todos estos años que llevamos juntos siempre demuestran ese brillo que es propio de las vidas felices, bondadosas , libres y generosas como las de mi Boro y la de todos los perros y animales del mundo.

domingo, 3 de junio de 2012

¿Cómo se hace?



¿Cómo hacés para
no querer
a alguien así?
¿Cómo no
caer rendido
ante ante
tanta dulzura
y bondad? 




Si alguien lo sabe
que me lo diga,
porque yo
no puedo
resistirme,
y la verdad,
tampoco
me interesa
hacerlo.

sábado, 2 de junio de 2012

Feliz día del perro Borito.



Te quiero.

Siempre lo supe.

Siempre supe que estarías llenando mi vida con tu felicidad, tu libertad y tu pureza; transformando mi existencia en algo más loable y grande.
Siempre supe que desde tu llegada a casa todo sería diferente sin poder predecir hasta que punto cambiarían las cosas en mi vida, y en la tuya seguramente.
Siempre supe que quería tener una compañía que necesitara de mi y que, producto del cariño, el compartir diario y los momentos vividos, me invitase a mi también a necesitar de ella.
Siempre supe que estaría esperando por tu llegada, sin saberlo quizás a ciencia cierta, pero esperando por alguien como vos en mi vida. GRACIAS TOTO, POR TODO ESTO, GRACIAS.

viernes, 1 de junio de 2012

Dulces sueños Totito.


Completan nuestra vida, sin lugar a dudas.

Siempre me alegra saber que debo caer en la cuenta de que estos días de mi vida, junto a Boro, son de los que quedarán definitivamente dentro de los mejores que viva, y el estar a tiempo y dándome cuenta de ello me hace sentir afortunado, es más: afortunadísimo. Lo siento a diario y por eso no me canso de decirlo.
El tener este blog para expresar a diario -o regularmente al menos- la dicha de sentirme el feliz compañero de un perro, y yendo más allá de eso, de un animal; es algo que realmente ennoblece mi vida.
Sí, es así; y creo que todos los que conviven o han convivido alguna vez con ellos quizás puedan entenderme mejor que los que (aún) no lo han hecho, con respecto a lo que intento hacer referencia, porque es la plenitud del afecto y la fidelidad de poder estar al lado de algún ser de esta especie lo que no se compara ni equipara a ningún otro tipo de convivencia o compartir diario.
Por eso acá estoy, como en gran parte de mis entradas, transmitiendo esa felicidad y esa dicha de vivir junto a Boro y poder disfrutar cada día de todo lo que sólo seres tan nobles, transparentes, puros y alegres como los animales pueden transmitirnos y hacernos experimentar viviendo a nuestro lado.
No transmito nada nuevo para cualquier feliz compañero de algún animalito, ya lo sé; pero si comunico y revelo para quienes no saben de estas compañías que seres libres, luminosos y pacíficos como los compañeros de vida -no humanos- vienen a completar definitivamente nuestras básicas, y muchas veces tristes, existencias humanas.